Hace unos días terminó la reunión entre la Unión Europea y la CELAC. Las siglas EU obedecen a la versión en inglés con que fue convocada la asamblea. Este foro venía celebrándose regularmente pero no se hacía desde 2018, por problemas logísticos en los que seguramente la pandemia fue un obstáculo fundamental.
La CELAC nace en 2010, me parece que un poco como contraparte de la OEA, organización más antigua. Una gran diferencia es que en la CELAC no están incluidos Estados Unidos, Canadá ni Haití. No pocas controversias se han desatado al acusar a la OEA por estar influida por los países poderosos especialmente por los americanos, hace unos tres años se convocó una reunión que se llevaría, o llevó, a cabo en California. Andrés Manuel López Obrador se inconformó porque no asistirían ni Cuba, ni Nicaragua, ni Venezuela; Cuba fue expulsada de la OEA hace muchos años y fue readmitida en 2010 pero el gobierno cubano no aceptó reintegrarse, Nicaragua y Venezuela están fuera por razones obvias, México se dedicó a criticar y quizá hasta a sabotear el foro que tuvo muy poco éxito, poco después se llevó a cabo una reunión de la CELAC en la Ciudad de México, que transcurrió sin pena ni gloria, con manifestaciones políticas amplias, pero sin resultados en otras áreas.
Ahora era la ocasión de reunirse con todos los países latinoamericanos, hacerlo en Bruselas en el marco de la UE parecía muy importante, pero nuestro presidente no acudió, se quedó a realizar su trabajo cotidiano en sus conferencias mañaneras, realizando fundamentalmente política (grilla) electoral, mandó a la canciller Bárcena, recién llegada a su cargo. Por diferentes razones seguí la reunión en la prensa española y francesa y fue muy resaltada en las noticias de la televisión española, un poco menos en la francesa; en México poco o nada apareció en la prensa, sólo una foto de la secretaria de Relaciones Exteriores con el presidente Lula. Por parte de la Unión Europea asistieron muchos si no todos los mandatarios de los países que la conforman, estaban el presidente Macron y el canciller alemán Olaf Scholz; desde luego Charles Michel presidente del Consejo de la UE y Úrsula von der Leyen presidente de la Comisión Europea, y el presidente español, Pedro Sánchez, en su calidad de presidente en turno de la UE, estuvo en todo, a pesar que estaba en plena campaña electoral y creo que por eso la noticia fue tan resaltada en la prensa española.
Asistieron Alberto Fernández de Argentina, Guillermo Boric de Chile, Guillermo Lasso de Ecuador, Petro de Colombia, así como los presidentes de Uruguay, Paraguay, Costa Rica y Panamá entre otros, el presidente Díaz Canel estuvo intentando ser muy protagónico, a Nicaragua la representó su secretaria de Relaciones Exteriores Denis Moncada, y a Venezuela su vicepresidenta Delsy Rodríguez, que tuvo que obtener un permiso especial para entrar a Europa, porque está acusada de faltas ante los Derechos Humanos y haber protagonizado varios incidentes diplomáticos. No supimos si Perú con toda la crisis que vive, mandó alguna representación.
La reunión fue muy interesante, con claroscuros en sus resultados. Hablando de los positivos diremos que la Unión Europea, se comprometió a patrocinar financiera y técnicamente a Argentina y Chile para obtener energías renovables, Ecuador obtuvo fondos y ayuda técnica, al parecer ambas amplias, para trabajar sobre la obtención de Litio, y así otros beneficios, al final se ofrecieron 45,0000 millones de euros para diversos programas en la región. No es poco es alrededor de un billón de pesos, además de las ayudas técnicas que se ofrecieron. Fungió como líder del grupo de la CELAC el presidente Inacio Lula da Silva, muy activo y protagónico en todas las reuniones, creo que ese espacio debió ser llenado, o cuando menos compartido por la delegación mexicana, pero no fue así, el presidente López Obrador no acudió y la canciller Bárcena no apareció.
No todo fue miel sobre hojuelas, la UE y los que la conforman pidieron que en el documento final incluyera una declaración sobre la crisis de Ucrania, desde el principio varios de los Latinoamericanos manifestaron que esto no era motivo de la reunión, quizá tuvieran razón, al final se obtuvo una declaración censurando lo que sucede en Ucrania, se uso el término de Guerra de Ucrania y no el de invasión de Ucrania, como se intentó inicialmente, Nicaragua no firmó el documento. Los países europeos requieren todo el apoyo posible para su actitud patrocinadora de los ucranianos. Díaz Canel poco logró a pesar de participar en los plenos y tener reuniones bilaterales con los mandatarios francés y alemán, consiguió una crítica al bloqueo; los nicaragüenses no consiguieron nada y tampoco ofrecieron. Se llevo una reunión de conciliación entre el gobierno venezolano y su oposición, no se consiguió nada y las dos partes quedaron insatisfechas, además de los funcionarios de la UE presidieron o condujeron Petro y Fernández y participó Delsy Rodríguez. El funcionamiento de Merco Sur no logró desatorarse, pero se dieron pasos que pueden conducir al éxito.
Total, una muy interesante reunión, que mediante el diálogo puede conducir al progreso de nuestra región, que mucho la necesita, hay que buscar entre todos, que los gobiernos francamente antidemocráticos, dejen de serlo, que los intercambios económicos, educativos y sociales sean realmente amplios y no nos caractericemos simplemente por nuestros orígenes y vivir como vecinos en una región sin lograr compartir todos nuestros potenciales.
Muy interesante Dr Ramiro, saludos y gracias