A raíz del 50 aniversario de la publicación de ‘Los límites al crecimiento’, se han publicado numerosos artículos, y se han organizado diversos eventos académicos en varios lugares en el mundo. Jeffrey Sachs publicó en ‘il sole 24 ore’ un artículo en el que hace un lúcido recuento de este libro a 50 años de su publicación, que describe con enorme claridad varios de los aspectos más relevantes del mismo, su significado actual y los retos que debe enfrentar la humanidad para superar las crisis generadas por la acelerada destrucción de la naturaleza, que debemos resolver para sobrevivir. Estas reflexiones las efectuó a partir del planteamiento de la Regeneración 2030, (Regenerative Society Foundation) en el que el Club de Roma se plantea cuanto nos queda por recorrer para superar los problemas que afrontamos.
Sostiene Sachs que el Club de Roma sacudió al mundo con su innovador informe ‘Los límites al crecimiento’ hace 50 años. Este liderazgo continúa actualmente con Regeneración 2030 para desarrollar prácticas económicas más holísticas, éticas y sostenibles para que el mundo pueda alcanzar los Objetivos del Desarrollo Sostenible y el Acuerdo de París sobre el clima.
Recuerda Sachs que la publicación de ‘Los límites al crecimiento’ coincide con su propia evolución intelectual. Señala que, al iniciar sus estudios de economía en Harvard, hace 50 años, uno de los primeros libros que tuvo que leer fue precisamente ‘Los límites al crecimiento’. Sostiene que este Estudio le causó una profunda impresión ya que por primera vez se publicó una proyección matemática de la economía mundial y la naturaleza en forma holística. Se utilizaron los nuevos sistemas dinámicos de modelado que en esa época desarrollaba el Instituto Tecnológico de Massachusetts, (MIT). Cabe precisar que esta investigación se efectuó en la ‘Sloan School of Management’ del MIT, que dirigía Jay Forrester.
En los ‘Los límites al crecimiento’, se advirtió que el crecimiento económico mundial estaba en camino de sobrepasar los recursos finitos de la Tierra, generando una posible catástrofe en el siglo XXI. Pero anota varias críticas de su profesor de economía. En primer término, la investigación que contiene el libro fue coordinada por ingenieros, no por economistas; en segundo lugar, el sistema de mercado se corrige a sí mismo.
Cincuenta años después, Sachs resume lo que sucede, la creciente economía mundial está sobrepasando los recursos finitos de la Tierra. Señala en primer término, que los científicos sostienen que la economía global excede los límites naturales de la Tierra; la transgresión de estos límites amenaza los sistemas físicos del planeta y por lo tanto a la propia humanidad. La actividad humana está calentando el clima, destruyendo el hábitat de millones de otras especies, contaminando el aire, los sistemas de agua dulce, los suelos y los océanos. Un tercer aspecto es que la economía de mercado, por sí sola, no detendrá esta destrucción. Añade que actualmente la Tierra es tratada como un vertedero libre para muchas prácticas destructivas.
Sachs también refiere un listado de frustraciones. En 1992, veinte años después de la publicación de los ‘Los límites al crecimiento’, se celebró la Cumbre de la Tierra, en Río de Janeiro, en la cual se aprobaron varios tratados internacionales como la ‘Convención Marco de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático, (CMNUCC) y el Convenio sobre la Diversidad Biológica. Veinte años después, en 2012, los gobiernos se volvieron a reunir porque los tratados internacionales en materia ambiental no funcionaban adecuadamente. La Tierra estaba en peligro creciente. En 2015 la Asamblea General de la ONU aprobó los 17 Objetivos del Desarrollo Sostenible y después, ese mismo año, el Acuerdo de París sobre el Cambio Climático.

Coincide Sachs con el frustrante diagnóstico general. Han pasado 50 años, desde los primeros avisos del riesgo de colapso por la acción destructiva del ser humano y muy poco se ha logrado. La Tierra continúa calentándose a un ritmo muy acelerado. El planeta está más cálido en 1.2°C que en el periodo preindustrial. La temperatura del planeta es mayor que en cualquier otro momento de los últimos 10 mil años. El calentamiento global se ha acelerado a 0.3°C por década, lo que significa que probablemente rebasemos la meta del Acuerdo de París de 1.5°C de límite al aumento de temperatura para el siglo XXI.
Pero, al ser Sachs un distinguido economista, la parte medular de su artículo, es que es clara la diferencia entre el crecimiento económico y el progreso económico real. El crecimiento económico está basado en aumentar las medidas tradicionales del ingreso nacional. Se limita a hacer más de lo que ya estamos haciendo: aumentar la contaminación, más emisiones de gases de efecto invernadero, más destrucción de bosques. Tiene claro Sachs, que el verdadero progreso económico tiene por objeto aumentar el bienestar de la humanidad poniendo fin a la pobreza, logrando una economía más justa y equitativa, con educación de calidad, evitando nuevos brotes de enfermedades y aumentando el nivel de vida mediante tecnologías sostenibles. El verdadero progreso económico tiene por objeto transformar nuestras sociedades y tecnologías para aumentar el bienestar humano, con una población aún creciente, con un fuerte envejecimiento, me permito añadir.
El proyecto Regeneración 2030 trata de aprender de la naturaleza misma, creando una economía más circular que elimine los desechos y la contaminación mediante el reciclaje, la reutilización y la regeneración de los recursos naturales. Es claro que una economía no puede ser completamente circular. Pero un punto es claro, en lugar de combustibles fósiles, la energía debe venir de fuentes renovables, como la solar, la eólica, hidráulica, o bioenergía sostenible y otras tecnologías seguras. Es claro que esto no basta, ya que se requieren modificaciones profundas en la economía y en la sociedad, pero es un paso necesario y urgente.
Otra parte importante de su posicionamiento es su esfuerzo por renovar la economía para que se convierta en una disciplina académica nueva y más holística del desarrollo sostenible. Así como las empresas deben ser más holísticas y alineadas con los ODS, la economía como disciplina intelectual debe reconocer que la economía de mercado debe insertarse en un marco ético y que la política debe apuntar al bien común. Promueve la transdisciplinariedad colaborando las ciencias naturales, las ciencias políticas, las ciencias humanas y las artes. Cita Sachs al Papa Francisco quién invita a adoptar la ‘Economía de Francesco’, inspirada en el amor a la naturaleza y a la humanidad de San Francisco de Asís. Cabe también mencionar, en este punto, el importante mensaje papel expresado en la Encíclica ‘Laudato si’, de hace algunos años.
Concluye, Jeffrey Sachs, señalando que el desarrollo sostenible, la economía regenerativa y la Economía de Francesco son una nueva forma de aprovechar nuestro saber hacer, que son tecnologías del siglo XXI y la ética para promover el bienestar humano.
El primer principio, dice Sachs, es el bien común, de ahí la importancia de la paz y la cooperación. Es necesario poner fin a la guerra en Ucrania en la mesa de negociaciones y encontrar un objetivo global común entre oriente y occidente. Ese lugar común, me parece es evitar el colapso del planeta, detener la acelerada destrucción de la Tierra, así como combatir la enorme desigualdad global.
En suma, como señala Carlos Alvarez Pereira, cuando se publicó en 1972, ‘Los límites al crecimiento’ se trató de un trabajo pionero, un éxito mundial … que no cambió el mundo. Ahora, como señala Antonio Guterres, el Secretario General de Naciones Unidas, ‘el planeta está en quiebra. La humanidad está en guerra con la naturaleza. Es un suicidio’. Hay mucho por hacer y el tiempo se acaba. La pandemia del COVID-19, fue una tragedia que atrasó los Objetivos de Desarrollo Sostenible y la implementación del Acuerdo de París, pero también nos mostró que podemos cambiar rápidamente nuestra forma de vida frente a una emergencia. Es necesario actuar ya.