El largo plazo y Donna Fenn
Manuel Guzmán

Contraste Económico

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El secreto para invertir exitosamente en el mercado de valores de acuerdo con Donna Fenn es la paciencia.

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Prácticamente a lo largo de todo el año hemos insistido en la importancia de entender la naturaleza de largo plazo del mercado accionario. Es cierto, actualmente existe un entorno caracterizado por una gran incertidumbre y volatilidad debido fundamentalmente a tres factores: la guerra entre Rusia y Ucrania, el inicio de un ciclo restrictivo en la política monetaria de la Fed y, los confinamientos en china ante la estrategia gubernamental de COVID cero.

Es importante recordar que históricamente se han presentado eventos mucho más complejos que los que acabamos de enumerar y el factor común ha sido el regreso de los mercados, primero, a los niveles existentes antes de la aparición de dichos eventos económicos o geopolíticos y después han registrado nevos máximos históricos, fortaleciendo la tesis de que el mercado bursátil es el vehículo por excelencia para formar y acrecentar un patrimonio.

Vale la pena recordar que prácticamente ya han reportado todas las empresas del S&P500 y alrededor de 92% registraron crecimientos en ventas y utilidades y la gran mayoría ofrecieron guías positivas para los siguientes doce meses. Esto quiere decir que los ajustes en precios son, en la mayoría de los casos, injustificados y, por lo tanto, representan una extraordinaria oportunidad para participar en el mercado accionario en condiciones altamente favorables.

De 1980 al 2020, el mercado accionario enfrentó múltiples retos: en 1987 la crisis del mercado bursátil causada por la guerra entre Irak e Irán, en 1990 la crisis de los Savings and Loans, en 1998 se presentó la crisis del fondo LTCM, en 2000 la crisis Dotcom, en 2001 los ataques terroristas a las torres gemelas de NY, en 2008 la crisis Subprime, y en 2020 la pandemia por COVID. Parecería un periodo muy complicado para las inversiones y adversos para el mercado bursátil. La verdad es que más bien fue un lapso de oportunidades para formar un patrimonio.

Lo anterior viene al caso por una historia que muestra como se puede formar un patrimonio muy importante invirtiendo en el mercado accionario y manteniendo una visión de largo plazo. El caso de Donna Fenn es muy famoso en Estados Unidos por tratarse de una historia de paciencia, temperamento, disciplina y visión de largo plazo.

Desde joven, Donna empezó a escribir sobre negocios emergentes y empresarios con visión innovadora, hoy es una reconocida escritora, editorialista, y escritora de libros sobre negocios y entreprenurismo, destacando “Perros Alfa: Cómo tu pequeño negocio puede convertirse en líder de la manada”, además de dedicarse a dar conferencias en todo el mundo sobre el rol de las empresas de reciente creación y cómo potenciar su crecimiento.

En 1985 Donna contaba con 26 años y tenía poco de haber terminado sus estudios universitarios. Un amigo suyo, corredor bursátil, le recomendó que comprara acciones de una empresa poco conocida entonces, Apple, una de las empresas más grandes e icónicas del mundo en la actualidad. Nadie se hubiera imaginado que la empresa fundada por Steve Jobs y Steve Wozniak en la década de los 70, dedicada a producir circuitos electrónicos, sería una de las empresas más reconocidas y de mayor valor del planeta.

inversión donna fenn

La empresa hizo su debut en el mercado accionario de Estados Unidos el 12 de diciembre de 1980 a un precio de 22 dlls por acción, aunque a lo largo de su historia ha realizado varios splits, lo que significa que los inversionistas reciben más acciones pero el precio de estas se divide entre cada una de ellas de manera proporcional por lo que el valor de la inversión permanece igual, aunque sí se tiene un efecto positivo sobre la bursatilidad de la emisora. Cuando Donna se animó a comprar acciones de Apple en 1985 distaba mucho de ser el gigante tecnológico que es hoy, y que ya tiene un valor de mercado superior al billón de dlls, pero Donna consideró que podría ser una buena inversión, sobre todo porque ella se dedicaba precisamente a apoyar empresas jóvenes e innovadoras, de manera tal que por consistencia con sus principios decidió comprar algunas acciones a un precio de 39 centavos de dólar.

Hasta la fecha, Fenn ha tenido un rendimiento de su inversión en Apple de 50,000%, una cifra extraordinaria que refleja claramente que Donna nunca perdió de vista su objetivo de formar un patrimonio en el futuro. Donna no ha revelado cuantas acciones compró ni cuánto dinero invirtió en aquella empresa que inició operaciones en un granero, y que hoy tiene más de 1.4 billones de usuarios activos alrededor del mundo en sus diferentes productos, tiene 140,000 empleados e ingresos anuales por 260 billones de dlls. Se presume que Donna invirtió 10,000 dlls en acciones de Apple en 1985, por lo que hoy esa inversión vale 5,000,000 de dlls.

Algo que Donna señala que ha aprendido de su experiencia como inversionistas en el mercado bursátil, es que los precios constantemente fluctúan, pero la tendencia es siempre alcista. Recuerda como en agosto de 1997 subió 33.3% en un día, mientras que el 29 de septiembre del 2000 la acción cayó 51.9% en medio de la crisis Dotcom. No siempre se tiene días buenos, pero la prudencia y el temperamento son los mejores consejeros en estos días de incertidumbre.

Donna comenta que ve con naturalidad los altibajos en los precios de las acciones y comenta que, a pesar de tener ya un rendimiento extraordinario en Apple, no tiene intenciones de vender los papeles adquiridos en 1985 y cree que hoy puede mantener aún una visión de largo plazo para su inversión en Apple. El secreto para invertir exitosamente en el mercado de valores de acuerdo con Donna Fenn es la paciencia.

Sin dejar de reconocer que los mercados bursátiles del mundo atraviesan por una coyuntura complicada por el conflicto bélico entre Rusia y Ucrania y un panorama de mayores tasas de interés como medida para contener la escalada de la inflación, es importante tener presente que eventos similares, o de mayor trascendencia, se han presentado en el pasado y los mercados siempre han retomado su tendencia alcista, por lo que estos ajustes deben de ser vistos como oportunidades maravillosas.

Existen casos más recientes con la misma enseñanza que sugiere Fenn, como el de Jason DeBolt, uno de los Teslaniers más reconocidos. Este término es un acrónimo de las palabras Tesla y Billioners, que hace referencia a la gente que se hizo millonaria invirtiendo en acciones de Tesla.

Tesla salió a bolsa en junio de 2010 a un precio de 17 dlls y registró un máximo de 1,134 dlls en noviembre de 2021. DeBolt compró acciones de Tesla tres años después del IPO e invirtió 19,000 dlls, llegando a tener una valoración cercana a los 20,000,000 de dlls a finales de 2020. DeBolt comenta que empezó a invertir en Tesla después de comprar un Tesla Modelo S en 2013 y de hacer un recorrido por la planta.

DeBolt sostiene que cree firmemente en los fundamentos de la empresa y que planea mantener las acciones de la empresa por un periodo largo de tiempo. También señala que ha tenido que aguantar muchos ataques especulativos contra el precio de la acción, pero que confía en la administración de Musk. Tanto en el caso de DeBolt como el de Donna Fenn, el factor común es la visión de largo plazo.

“El verdadero inversionista es aquel que espera que las acciones de las empresas bajen,
para poder comprarlas más baratas”. Warren Buffett


Manuel Guzmán M., es Socio Director en IDEA Asset Management,
mguzman@ideaam.com.mx

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