El Instituto Nacional Electoral (INE) asignó las diputaciones plurinominales de cada partido para la Legislatura (2021-2024) que está próxima a iniciar, y revela que Morena necesitará más que nunca de sus alianzas para mantener la mayoría en la Cámara Baja del Congreso. 

Los resultados de las elecciones ya nos pintaban un panorama poco favorable para el partido en el gobierno en la Cámara de Diputados, pese a sacar el 34% de los votos en la elección federal y ganar 11 de las 15 gubernaturas en disputa.

Si bien, sigue siendo mayoría parlamentaria (partido con mayor número de legisladores) y los partidos opositores de Va por México (PRI – PAN – PRD) juntos sólo los supera en un curul, perdió poco más del 20% (54) de los curules que ostentaba en la Legislatura que está de salida. 

En las elecciones de 2018 Morena, como partido, sacó 161 diputaciones por mayoría relativa y 91 en representación proporcional para un total de 252 legisladores. Eso le daba la mayoría absoluta (la mitad más uno) sin necesidad de una alianza. 

En las últimas elecciones obtuvo 198 curules contando los de mayoría relativa y proporcional, ni con las y los legisladores del Partido del Trabajo (PT), su más cercano aliado, alcanza la mayoría absoluta en la Cámara de Diputados. A fuerzas necesita de su nuevo socio, el Partido Verde Ecologista (PVEM).

Hace seis años Morena pujaba por desaparecer al Partido Verde por sus múltiples violaciones a la Ley Electoral. Como en la vida muchas cosas cambias, esa consigna de desaparecer al PVEM se convirtió en una súplica para mantener la alianza en la próxima Legislatura. 

Al partido en el gobierno le saldrá cara su nueva alianza, especialmente en esta segunda mitad del sexenio de López Obrador en que se buscarán concretar todas las reformas del proyecto obradorista. 

Esto es una muestra de la temprana debilitación de Morena. Como consecuencia de aceptar a todos los actores de la vieja política que tanto desprecian, el partido se fragmenta, sin rumbo y se llena de políticos que buscan satisfacer sus deseos personales como Mario Delgado y Ricardo Monreal.

Esta conformación de la nueva Legislatura también es una lección para la oposición que presumió de haber ¨ganado la elección a Morena¨, pese a que los resultados no demuestren tal afirmación.

Que para la alianza Va por México una victoria sea superar por un curul a Morena, nos da un diagnóstico de su mediocridad política la cual se traslada a su modus operandi al momento de ostentar al poder. 

Si quieren llegar con chances para la elección de 2024 con el objetivo de ¨sacar a Morena del poder¨, deberán de trabajar más en las calles y con la gente y no dejarse cebar con esta presunta victoria, si es que no quieren llevarse otra mayúscula sorpresa como la de hace tres años. 

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