Ellos se ríen de mi porque soy diferente.
Yo me río de ellos porque todos son igualitos.
Anónimo.
En agosto 19 de 2019 elaboré un artículo con el título de Funcionarios mexicanos en la Luna, considerando el reducido éxito que México había registrado en el intercambio comercial con los países con los que habían firmado numerosos acuerdos, memoranda, tratados, cartas de intención, etc.
A manera de chunga señalé que el único tratado en el que yo veía grandes posibilidades de obtener resultados positivos para México era el Acuerdo de Cooperación con la Agencia Espacial Europea, pues parecía que nuestros altísimos funcionarios estaban en la Luna y, seguramente, algo conocían del tema espacial.
También señalé que la firma del TPP-11 confirmaba esta situación porque era una muestra clara de la incoherencia que caracterizaba a las decisiones de los encargados de diseñar la política de comercio exterior, así como la estrategia de promoción de las exportaciones y la inversión extranjera, lo que me hacía pensar en lo lejano que estaban de nuestro planeta y lo cercano que se encontraban al cuerpo celeste, pues los antecedentes que habían tenido en la relación con los que serían los seis nuevos socios del TPP-11 de Asia y Oceanía, en el período 1993-2018, eran muy negativos y parecía que no se habían tomado en cuenta.
El déficit con los países que serían nuestros nuevos “socios” había crecido exponencialmente y pasó de -545 millones USD, en el año de 1993, a -14,401 millones USD en 2018.
Para el período completo 1993-2018, el déficit acumulado fue de -150,483 millones USD, lo que representaba el 85% del déficit total de México, mismo que ascendió -177,679 millones USD, equivalente al 13% de nuestro PIB Total del año 2018.

Por desgracia, en los 33 meses de vigencia del TPP-11, la situación sigue empeorando y cabe destacar que, en estos dos años y nueve meses, las exportaciones mexicanas con ese destino, con respecto al año 2018, registraron un decremento de -2,544 millones USD; en tanto que las importaciones se incrementaron en 4,142 millones USD, motivo por el cual, en este reducido período, el déficit comercial con ese bloque fue de -48,338 millones USD.

Así, nuestro déficit con esos seis países, en el período 1993-2021 alcanzó la cifra de -198,821 millones USD, en tanto que el déficit total de México, en el mismo período, fue de -146,650 millones USD.
Adicionalmente, habría que señalar que el déficit con esos seis países, para el período 1993-2021, fue equivalente al 19% de PIB Total de México en 2020, en tanto que la importación total ascendió a 236,181 millones USD, es decir, el 22% del PIB Total para el mismo año.
Comentarios
A pesar de los antecedentes tan negativos que había del intercambio comercial de México, mismos que mostraban un déficit creciente con el bloque de seis países, la Secretaría de Economía promovió la negociación de México con el TPP señalando que si EE.UU., nuestro principal socio, participaba en el mismo, era necesario que estuviéramos presentes en dicho proceso para defender nuestras posiciones.
Lo sorprendente es que, en un acto verdaderamente coherente, tal vez el único que el presidente de EE.UU., Donald Trump, tuvo en materia de comercio exterior, fue retirarse de las negociaciones. Sin embargo, México decidió continuar con las mismas a pesar de la total desventaja que nuestro país presentaba en materia de competitividad, situación que ha empeorado, ya que ahora registramos total desventaja en 122 de los 140 elementos que miden la competitividad con esos países y sólo tenemos ventaja relativa en 18.

La supuesta razón para seguir con este obtuso proceso fue que mucho se había trabajado y obtenido en la negociación, lo que difícilmente puede concebirse al ver los resultados negativos que hemos obtenido en estos 33 meses en relación con esos países, ya que cada día importamos más y, al mismo tiempo, exportamos menos valor agregado.
En relación con nuestros socios del T-MEC, la situación es igual debido a que México resulta ser el único país del bloque que no es competitivo, por lo cual no se ha podido lograr el objetivo que se estableció en el TLCAN de alcanzar una integración comercial y productiva. El bajo nivel de competitividad ha impedido aprovechar las ventajas comparativas y la supuesta complementariedad de México con Canadá y EE.UU.

Apuntes finales
Desgraciadamente, la penosa situación de nuestro comercio exterior es resultado de la carencia de una estrategia realista que incluya elementos que nos permitan ganar. Esto debido a que durante los 28 años más recientes, los efectos en el sector han sido todo lo contrario a lo propuesto. Nuestras pocas fortalezas se han visto disminuidas, en tanto que nuestras debilidades se han magnificado, sobre todo porque no existe un proyecto de país dentro de un esquema de crecimiento económico y desarrollo nacional, así como de la región.
[…] México pierde y sus seis “socios” del TPP-11 siguen ganando […]